* Por C.P. M.I. Fernando Lechuga Díaz
* Coronavirus deja sin ingreso a la mayoría de las empresas
* Medidas para enfrentar la crisis y alcanzar la continuidad

25 Abril 2020

Andrew Cuomo, Gobernador del Estado de Nueva York, es considerado actualmente uno de los líderes de gobierno que mejor ha sabido navegar en la turbulencia generada por la crisis pandémica del Covid-19.

Nueva York, por la naturaleza de su población, es posiblemente uno de los Estados con mayor complejidad para atacar los problemas que se presentan en materia de salud, logística e incluso económicos en la Unión Americana. Cuomo en sus ruedas de prensa ha compartido las acciones e incluso reflexiones de su equipo de gobierno, consejeros y científicos de manera conjunta, y como han intentado sobrellevar los retos que se presentan en estos tiempos tan complicados.

Algunas de estas reflexiones son sobre los mismos problemas que vivimos en nuestro País, y pueden ayudar a dar luz a importantes consideraciones que deben atenderse para sobrevivir esta pandemia desde los puntos de vista de la salud y el económico. La resiliencia es un tema de toral importancia y debe ser atacado con vital eficacia por todos los participantes de la sociedad y comprender desde el plano macro y microeconómico cuales son las circunstancias que apremian.

Andrew Cuomo dice: “El momento que enfrentamos no tiene paralelo, jamás se ha experimentado algo similar.” Esta pandemia nos ha paralizado en una cuarentena forzosa, la reclusión es una especie de coma inducido que ha paralizado a la economía mundial. Hoy en día es fundamental tener un plan de contingencia que permita la continuidad de los negocios, la conservación del empleo, y la subsistencia de las familias.

Esta tormenta perfecta deja sin ingreso a la gran mayoría de las empresas que sufren de falta de liquidez, para pagar sus nóminas, a sus proveedores e incluso cumplir con sus obligaciones fiscales. En una economía que ya comenzaba a estar en recesión resulta complicado que las empresas tuvieran reservas para sostenerse en esta crisis, para mantenerse a flote tendrán que incurrir en deuda, recorte de sueldos e incluso mora de pagos. La ayuda gubernamental se vuelve fundamental para la subsistencia y es aquí donde comienza a agravarse el problema.

Cuomo advierte: “Para el gobierno tomar la decisión de salir de nuevo a trabajar es una cuestión de salud pública y una cuestión económica. No se pueden divorciar la una de la otra.” La actuación del gobierno es sumamente complicada, su función principal en estos momentos es salvar vidas y mantener el orden público, pero también es mantener la economía a flote. ¿Cómo obtener recursos para combatir una pandemia cuando la actividad del País está colapsada? La mayoría los asesores económicos han recomendado al Gobierno mexicano, que se encuentra sin reservas financieras, que deberá realizar dos acciones principales en materia Fiscal: a) adquirir deuda para aumentar el ingreso (y de paso no apretar a los contribuyentes); y b) restringir su gasto.

Tristemente estas dos acciones el Ejecutivo Federal se ha negado a realizarlas. Si el Gobierno Federal desea proteger la economía de este País deberá relajar la recaudación fiscal, no con exenciones sino con diferimientos; ayudar a las empresas con el diferimiento en el pago de sus obligaciones de seguridad social; e incluso otorgar subsidios discrecionales. Hasta este momento las recomendaciones no han sido escuchadas.

Cuomo finaliza: “El siguiente paso será sumamente importante: ¿Cómo reactivamos? ¿Cómo reconstruimos? ¿Cómo avanzamos como sociedad, como individuos?”. El sobrepasar este estado de parálisis económico es el reto de todo mundo en estos momentos. Las pequeñas y medianas empresas que serán de las más afectadas por este estado de inactividad y que sobrevivan al pago de nóminas y obligaciones con ingresos mermados o nulos, necesitarán liquidez o crédito para capital de trabajo y con ello iniciar de nuevo operaciones.

En materia fiscal se proponen acciones que incentiven a las empresas como puede ser el regreso de la deducción acelerada de inversiones, o acciones que premien por medio de subsidios, a los patrones que conserven intacta su planta laboral, incluso se contemplan como recomendaciones de organismos internacionales llevar a cabo reformas fiscales post covid-19 que incentiven la recuperación económica de las empresas.

Sin embargo, estas reflexiones que comenta Andrew Cuomo son a nivel macroeconómico, del cual el gobierno, las empresas y los individuos participan en el agregado, pero ¿cuáles acciones debieran realizar las empresas e individuos para controlar su destino ante una situación que pudiera, en apariencia, estar totalmente fuera de sus manos? El enfrentar esta crisis y alcanzar la continuidad con medidas que se pueden tomar desde nuestro campo de acción es fundamental para la supervivencia individual. Es importante mencionar ciertas acciones que pueden tomarse por las empresas como estrategia de continuidad:

Establecer un plan. Entender los riesgos principales, definir cuál es la estrategia para sobrevivir e involucrar a todos los miembros clave de la organización para que se coordinen de una manera efectiva se logre salir de la crisis; Administrar de la mejor manera el efectivo. La mayoría de las empresas no cuenta con reservas para este tipo de contingencias. Revisar los flujos futuros, prevenir las salidas superfluas y maximizar el rendimiento del dinero es crucial. Las reservas y la conservación del efectivo es entonces la base de la supervivencia en estos momentos;

Buscar Fuentes alternativas de ingreso. Algunas empresas han mantenido su estabilidad financiera encontrando la diversificación. Por ejemplo, empresas que han buscado adaptar sus productos para satisfacer el mercado médico;

Coordinar los costos fijos de le empresa. La nómina es un ejemplo, para muchos el más importante. Comunicarse con el personal sobre las circunstancias y posibles medidas es una manera de controlarlos: Bajas de producción, turnos rotativos, posibles reducciones de salarios, entre otros; y

Adaptar la operación al mercado. Las empresas forman parte de una cadena productiva, el coordinarse con sus clientes y proveedores es crucial, días de inventario, tiempos de entrega, costos de insumos son parte de esta etapa.

En estos momentos todo México se enfrenta a un panorama complejo y lleno de incertidumbre. Desde un punto de vista económico los planes de acción que se apliquen, ya sea por gobierno, empresas o individuos por igual no permiten margen de error. La supervivencia de México depende de su capacidad de adaptarse y manejar sus opciones, desde planes de incentivos fiscales hasta como se administre el flujo de efectivo a nivel de las empresas. La resiliencia de nuestro País consistirá en cómo logremos resolver los problemas de salud y económicos por igual. Son tiempos en donde los factores productivos y los reguladores de la economía deben trabajar en plena armonía por el bien del País.

Sobre el autor:

C.P. M.I. Fernando Lechuga Díaz

Socio de impuestos del Despacho Reynaldo Lechuga S.C.

Correo Electrónico:

flechuga@drl.com.mx

El C.P. Fernando Lechuga Díaz, es miembro de la Academia Chihuahuense de Estudios Fiscales, A.C.